Cuando ves a tus peques pintando, dibujando, modelando materiales maleables y creando libremente, hay un sinfín de beneficios, más allá de la concentración y atención del momento, que es una ganancia ya en sí misma. Favoreces el desarrollo de la percepción visual, táctil, olfativa, auditiva, su motricidad y coordinación, ya que aprende a resolver situaciones sencillas como: abrir y cerrar envases, verter líquidos, mezclar sustancias, controlar sus movimientos, limpiar sus zonas de trabajo…
Como si no bastara ya con estos procesos cognitivos de atención y concentración señalados anteriormente, la explosión creativa que se da en sus cerebros es hermosa. Por experiencia (y seguro lo has vivido y experimentado) los trabajos que surgen espontáneamente en los niños, nos asombran, ellos tienen una capacidad imaginativa para transformar objetos, darles vida, movimiento, combinaciones mágicas de color. ¿Cómo no brindarles oportunidades para que desarrollen sus capacidades?
El arte infantil, en cualquiera de sus formas, además de ser un gran medio de expresión y comunicación (verbal, gestual, expresivo y comprensivo), es un excelente medio para acercarlos al mundo que los rodea. Incentivar procesos de observación, análisis, descripción, formulación de hipótesis…cuando practican actividades manuales y artísticas, no sólo despiertan su interés por el método científico, si no que se imprime en su ser un gusto extra por lo que sucede a su alrededor: personas, plantas, animales, objetos.
La práctica de experiencias creativas, además de brindarle momentos de calma, serenidad y contacto consigo mismos e identidad personal, les permite interactuar con otros, exponer sus ideas y sentimientos, desarrollar su autoestima y confianza.
Sin embargo, hay una idea superior que me parece fundamental, y es enseñarlos desde pequeños a APRECIAR LA BELLEZA DE LAS COSAS Y DE LOS MOMENTOS, esto es un regalo que nos da la vida, y se consigue hasta en el brote de una pequeña planta en una acera de concreto (por demás, amo tener la suerte de toparme con esos instantes casuales y seguro somos muchos quienes tenemos esa sensación).
Atrévete a regalarles y regalarte espacios creativos con tus peques. A por ello!
